
Se sabe de sobra que el personal eventual de las instituciones públicas son personas seleccionadas a dedo y a base de "amiguismos" para quedar enchufados a cambio de suculentos sueldos, a pesar de que su figura sea totalmente inútil e innecesaria para la actividad pública de los cargos a los que supuestamente asesoran.
De ahí que nuestra crítica hacia este tipo de cargos a dedo sea tan irrisoria y continua, porque, desde nuestro punto de vista, es uno de los principales agujeros de las arcas públicas, por los que se pierden enormes cantidades de dinero.
El último entresijo descubierto ha sido en el Ayuntamiento de Tías, dónde con toda la caradura del mundo se le ha DOBLADO el sueldo a un asesor de alcaldía, tan sólo tres semanas después de...